miércoles, 20 de febrero de 2013

BENEDICTO XVI Y EL PAPA CELESTINO V, ¿UN TEMPLARIO EN ROMA?.



Pietro Angeleri di Murrone, era el nombre de cuna de quien, al ocaso de su vida se convirtió, obligadamente en el Papa CelestinoV.Nació en Isernia en 1215 y murió en la torre del castillo de Fumone 19 de mayo de 1296, apresado por su sucesor en el pontificado Bonifacio VIII. En 1232 ingresó en el monasterio benedictino de Santa Maria di Faifoli. Su inclinación al ascetismo le llevó en 1239 a ser un eremita confinado en una cueva del monte Morrone, donde permaneció 5 años, fundando en 1944 la orden de los Celestinos, caracterizada por la vida en clausura. Llevó una vida propia de las costumbres de los Cataros, llegando a vestir una túnica humilde y áspera con una cadena a la cintura, emulando el aspecto de Juan el Bautista. Su nombramiento fue atípico, ya que la decisión de que fuese Papa fue tomada en su ausencia. Tuvo que personarse una comisión en el lugar donde habitaba Celestino V, para comunicarle el nombramiento. Su reticencia a ocupar el ministerio papal, le hizo rehuir varias veces a que ese hecho se consumara, pero al final lo ocupó solo por varios meses, al final de los cuales abdicó, puesto que el nombramiento de un Papa es comparable a una monarquía y es el término correcto para definir que un Papa deje su pontificado.. Este corto ministerio estuvo salpicado por episodios de huida, que al final le llevaron a su apresamiento y confinamiento en el castillo de Fumone, donde falleció, no se sabe con certeza si de muerte natural o asesinado, ya que las conclusiones de las pruebas radiológicas que se hicieron a sus restos en 1988, no han sido difundidas. 

 


Castillo de Fumone

 

En 1274  abandonó puntualmente su retiro, para asistir al concilio convocado por Gregorio X, en Lyon y se hospedó en la casa de los caballeros templarios a la que asistió el vigésimo primer Maestre templario francés, Guillaume de Beaujeu, que ostentó el cargo de Comendador de la Apulia, Italia, existe documentación que refleja ese encuentro . Aquí se plantea la primera pregunta, de cómo realizar ese viaje, sin contar con medios para ello, dada su condición de asceta. La respuesta está en los Templarios, como protectores de los peregrinos, pero no solo por ese detalle que como sabemos era una pantalla, para ocultar la verdadera misión del temple, si no por la influencia templaria, que posteriormente se vuelca en la construcción de la basílica de Santa María de Collemaggio, en la ciudad de L'Aquila, Italia en 1287, dos años antes de ser coronado Papa, basílica que está repleta de simbología templaria y alquimica. Evidentemente ese fue un encargo del temple, pues jamás se habría embarcado a una empresa de tal calado un eremita. El mausoleo que alberga el cuerpo de Celestino V, tiene el símbolo templario del Agnus Dei, el sello de Salomón y el del Rey David, así mismo figuran las efigies del Rey Salomón y la Reina de Saba, que no deja de ser curiosa esa simbología de la tradición judía. Se da la coincidencia de que en esa zona, se encontraba la antigua Iglesia de Santa María de la Asunción de construcción cisterciense. La fundación de la ciudad de L’Aquila fue atribuida a Conrado IV, en el año 1274, pero en realidad el artífice de la construcción de dicha ciudad fue su tío Federico II, gran conocedor de las claves esotéricas, de hecho se establece una gran correspondencia entre los planos de Jerusalén y los de L’Aquila .



 

En 1294, durante su breve papado Celestino V, emite la “Bolla de la Perdonanza” o Bula del Perdón, que absolvía a todo aquél que fuese a orar a la basílica. Otro detalle que llama la atención es la elección de su escudo papal, que muestra un dragón específico que, consultadas las fuentes en heráldica, nos remite a la insignia de la dinastía Rupénida del Reino Armenio de Cilicia, que fue un importante aliado de los cruzados, sobre todo de los templarios.

 

Escudo Papal Celestino V

 

Escudo de la dinastía Rupénida

 

Un cuadro anónimo del siglo XVII, recoge la coronación de Celestino V y curiosamente figura entre los personajes el Rey Eduardo II que luchó, junto con los Templarios, en la batalla de Bannockburn en 1314 en contra de Robert I de Bruce de Escocia, una copia de ese cuadro fue adquirida por el párroco de Rennes le Château, Bérenger Saunière, (cuadro que aparece en el frontispicio de este articulo). Son unas breves pinceladas históricas para comprender la relación de los hechos que envuelven la vida de este Papa y su íntima conexión con el temple.

 

 

El hecho de que su cráneo se encontrara perforado y en su interior se hallara un clavo de plomo, abre la más que probable vía del ritual funerario gnóstico, que practicaban merovingios y templarios, pero al ser robados sus restos en 1988, antes de que le practicaran las pruebas radiológicas, no ha transcendido el hecho de que, esa perforación se encontraba ya en su cráneo, o si por el contrario se descubrió después del hallazgo de esos restos, si fue ante o post mortem, porque eso sería de suma importancia y cambiarían algunas conclusiones, como por ejemplo de que fuese posterior al robo de sus restos, entonces estaríamos hablando de alguien que administró el ritual funerario gnóstico y por lo tanto, se abriría la hipótesis de que en pleno siglo XX, estaría presente una influencia capaz de realizar un acto semejante. No es el único cráneo que se ha encontrado con esa particular incisión en la parte izquierda. En algunas catedrales se muestran cráneos similares, la atribución de que sean o no de Juan el Bautista, como se adjudican o de cualquier personaje de transcendencia del cristianismo, no es relevante, si no el modus operandi practicado en esos cráneos, pues hasta ahora solo tenemos la certeza de la identidad de un cráneo, el de Celestino V.

 

Cráneo de Celestino V

Supuesto cráneo de Juan el Bautista

 

La afinidad, simpatía y similitudes del Papa Benedicto XVI, con la figura de su homólogo CelestinoV, es más que notoria. Son comunes a los dos pontífices, la reticencia a no ser nombrados para el ministerio. Se da igualmente la circunstancia de que Benedicto XVI, cuando la zona de L'Aquila y la propia Basílica de Collemaggio, fue seriamente dañada por el terremoto de 2009, anunció que todo aquél que fuera a orar a la Basílica, sería perdonado de sus pecados, al igual que recogía el texto de la Bula del Perdón, proclamada por Celestino V y ofreció su palio depositándolo en su urna funeraria. Su abdicación y su deseo de permanecer oculto y olvidado del mundo, recuerda al carácter eremita de Celestino. Puede que todas estas afinidades del Papa actual con el eremita, su decisión a abdicar y su apoyo demostrado, se deba a una necesidad de que se instaure una verdadera doctrina  gnóstica. ¿Estará dando quizás una orden subliminal para muchos a, quienes en la sombra esperan, para restablecer el orden perdido y la culminación de un plan para la humanidad de paz y justicia?.

 

 

El acto de Celestino fue criticado duramente en la obra de Dante Alighieri, la Divina Comedia, que lo definió como un cobarde, puede que él considerara que debía continuar en el Papado para hacer la reforma que el temple perseguía hace siglos y no asumió la decisión de Celestino V, o puede que tal decisión obedeciera a seguir preservando un secreto confiado por la orden templaria y que considerara que no era el momento oportuno para revelarlo a la humanidad, cosa con la que Dante, miembro de la Fede Santa, orden terciaria del temple, probablemente no estaba de acuerdo. A propósito de Dante, es significativo que  el párrafo final de “Deus caritas est” la primera encíclica escrita por el Papa Benedicto XVI, está inspirada en la Divina Comedia. Habrá que esperar a la última encíclica que está culminando y que no será pública hasta que se haya retirado, para ver que sorpresas nos depara. Para finalizar, que no cerrar este tema tan apasionante, citar los versos que Dante le dedica al Temple, en el “libro del Paraíso” de la Divina Comedia versos 127-129 del capítulo XXX, que de una forma sutil, dice:

 

"Como al que quiere hablar y no halla acento me llevó Beatriz y dijo: Mira de estolas blancas este gran convento".

 

Dante en el Purgatorio